El nuevo Terra HP Generation III de 350 kW ofrece una experiencia de carga de primera categoría y apoyo completo a una mayor personalización de la marca del operador.

Ideal para carga en autopistas y en flotas de vehículos eléctricos, el nuevo Terra HP Generation III de 350 kW ofrece una experiencia de carga de primera categoría y apoyo completo a una mayor personalización de la marca del operador.

ABB ha evolucionado aún más su cargador de alta potencia Terra (HP), el más vendido, para ofrecer una experiencia superior a los consumidores y diversas opciones de personalización para los operadores de carga.

El cargador Terra HP, que ofrece una gran potencia con bajos niveles de ruido, cuenta con un cable de carga retráctil de 5,3 metros para llegar cómodamente a las tomas de los vehículos, una intuitiva pantalla táctil de 15 pulgadas, tiras LED para mejorar la visibilidad nocturna y varias opciones de pago. El diseño compacto del puesto de carga facilita su uso, optimiza el espacio alrededor del vehículo y maximiza la flexibilidad en la disposición del emplazamiento.

El modelo Terra HP también apoya plenamente las operaciones comerciales. Ofrece diversas soluciones de pago opcionales, uso compartido de la potencia a través de la tecnología Dynamic DC para optimizar la utilización de los activos de carga y soluciones de gestión de emplazamientos para permitir el futuro crecimiento al tiempo que se mejoran los costes de optimización de la red. Además, la solución está totalmente preparada para el futuro gracias a las actualizaciones de software remotas y a la capacidad de carga de los vehículos eléctricos actuales y futuros con la amplia gama de tensiones de salida de 150 a 920 VCC y hasta 350 kW.

Terra HP ofrece accesibilidad y servicio en todo el mundo y proporciona la ventaja adicional de los servicios conectados ABB Ability™, que ofrecen mayor funcionalidad con la posibilidad de conectar fácilmente los cargadores a sus servicios centrales, plataformas de pago o sistemas de redes inteligentes. Aún más importante, la monitorización y el diagnóstico remotos minimizan el tiempo improductivo y mantienen a raya los costes de explotación.

 

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